Claymore nos sitúa en un mundo medieval acosado por una raza de demonios conocidos como Yoma. Estos demonios tienen la habilidad de cambiar de forma y se han disfrazados como humanos para infiltrarse en las aldeas y poder alimentarse de sus entrañas. Para hacerles frente nace una organización que busca crear guerreros con habilidades especiales mezclando piel y sangre de Yoma con humanos. Como resultado, estos guerreros, llamados Claymore, ganan fuerza sobrenatural, habilidad para cambiar de forma y rápida sanación. Por otra parte, cuentan con espadas que les permiten identificar a los Yoma de aldeanos comunes y silvestres. Debido a su naturaleza, los Claymore son usualmente temidos por los propios aldeanos que logran salvar.